Hace
un mes, fui de monte con el grupo de las Xanas, para subir al pico Taraniello,
en Yernes y Tameza. Como siempre, disfrutamos de una excursión bonita, y pude
admirar los parajes de este concejo. Es un concejo escondido dentro de
Asturias, tanto que tienes que ir expresamente a él, pues no está camino de
ningún sitio.
Un
compañero del grupo, Fernando, tiene sus orígenes allí, incluso podríamos decir
que se pierden allí, ya que el rastro de sus antepasados, tanto los más cercanos
como los más alejados, se ubican en este concejo, pues prácticamente no
salieron de esas tierras. Los hijos de Fernando constituyen la primera
generación nacida fuera de esos pueblos, y, a buen seguro, sus descendientes
recorrerán el mundo. De idéntica manera ocurre esto a los nuevos asturianos,
pues sufren una emigración superior a la tuvo lugar en los primeros años del
siglo XX, pero de una forma distinta, marcada por las comunicaciones. Sirva
esta entrada de homenaje a él y sus antepasados.
La
historia es una narración y exposición de los acontecimientos pasados y dignos
de memoria, incluso puede corresponderse con una narración de hechos inventados,
pero todos ellos juegan un papel muy importante en el diseño del escudo.
El
sistema emblemático heráldico, en cuanto a lo que entendemos como conjunto de
reglas o principios racionalmente enlazados entre sí, en los que se basa, se
forjó a mediado el siglo XII. Antes había escudos, pero a partir de esa fecha
nace la costumbre de personalizar los escudos de guerra, como señal de
identificación en el campo de batalla, aportando color y diseño, y a partir de
ahí, pasa a ser usado fuera de la batalla, como un signo ornamental. A partir
de ese momento, en un período muy breve, el uso heráldico dejó de ser algo
exclusivo de militar y se extendió al resto de la sociedad, dándole cada vez
más diseño y acompañándole de soportes, timbres y ornamentos de muy diversa
naturaleza. A partir de ese momento es necesario establecer modelos y reglas
para su confección y uso, y pasa a tener un carácter de identificación familiar
y territorial, es decir, representan un linaje o una jurisdicción. (Faustino
Menéndez Pidal de Navascués, Los emblemas
heráldicos. Una interpretación histórica, Real Academia de la Historia.)
Entiendo
que este criterio es el que se usa para justificar la incorporación de las
armas de nobles a los escudos de nuestros concejos, es decir, el de
pertenencia, o simplemente fuera una ocurrencia de alguien, ya muy
posteriormente a la época de esplendor de la heráldica, para dotar de armas
cuando no las tenían. En todo caso, la uniformidad no existe, hay concejos en
los que se ha comprobado la tradición de usar escudo, incluso a través de algún
sello, y otros en los que no hay ninguna prueba histórica de su uso. Un caso
claro es el propio escudo de Asturias, del siglo XVIII. A partir de aquí,
debemos considerar si es bueno tener una heráldica municipal o simplemente un
logo, es más, algunos ayuntamientos con escudo histórico, se pasan al logo.
Los
concejos del principado de Asturias tienen sus huellas en época bajomedieval,
es decir, en pleno periodo de expansión heráldica. Pero esto no se corresponde
con una tradición heráldica de nuestros Ayuntamientos.
La
Cruz de los Ángeles es una figura que tiene una presencia recurrente en las
armerías concejiles asturianas, bien con incorporación del escudo de Oviedo como
un cuartel de algunos escudos municipales o por una evolución, incorporando
simplemente la cruz, formando parte del diseño del escudo. Si no me equivoco,
está presente en 27 de los 78 municipios asturianos. (Para más información,
Álvaro Solando Fernández-Sordo, La Cruz
de los Ángeles en la heráldica municipal asturiana: Testimonio de un pasado de
señorío episcopal, III Jornadas de Heráldica y Vexilología Municipales)
Vamos
a ver un municipio que incorpora la Cruz de los Ángeles como cuartel dentro del
escudo. Yernes y Tameza es un concejo con Historia e historia, aunque su escudo
parece tenerla Historia, puede tener alguna historia. Es pequeño, pues en el
censo de 2018 constan 69 habitantes en la parroquia de Yernes y otros 71 en la
de Tameza. Es triste que tanta Historia quede tan reducida.
Existen referencias documentales a este
concejo desde el año 857, pues se cuenta con documentos que hacen referencia a
estos territorios y su vinculación con iglesia ovetense de San Salvador.
En 1579 retorna a poder de la Corona por
orden de Felipe II y, posteriormente, los habitantes del territorio consiguen
su compra para constituirse en municipio independiente. Según consta en el
documento que conserva el Ayuntamiento, fechado en el año 1581, el recate se
tasa en 12.691.922 maravedíes, a abonarse entre las 130 personas que allí
habitaban en ese momento. Por lo tanto, desde esa fecha, este concejo tiene
ordenanzas municipales, magistrados y regidores, estableciéndose Villabre como capital
del concejo desde 1584.
He
leído en referencia a este escudo que: “Actualmente
el ayuntamiento pinta las armas sobre un escudo francés, aunque sin cartela ni
ornamentación exterior”. Algo como
esto:
(Imagen y descripción tomadas de Wikipedia)
Cortado. En la superior y sobre
campo de azur, está representada la Cruz de los Ángeles, en referencia a su
pasado eclesiástico. En el inferior aparecen dos toros embistiéndose, que
cuenta la leyenda como se fijaron los límites con el concejo vecino de Proaza,
haciendo luchar a los dos toros y marcando la posición en la que quedaron
después del combate. Al timbre la corona real abierta.
Aunque he visto esta descripción similar:
Cortado. El primero, sobre campo de
azur, la Cruz de los Ángeles de oro, engalanada con piedras preciosas, y siendo adoradas
por dos ángeles de plata en posición arrodillada. En el segundo; de plata, dos
toros enfrentados, de oro y plata, terrasados sobre sinople. Al timbre la
corona real abierta.
Incumple alguna regla heráldica, como
poner metal sobre metal. Al ser los toros de oro y plata, el campo no puede ser
de plata.
La mayoría de los escudos municipales asturianos
no tienen ninguna sanción legal, este es el caso de la enseña de Yernes y
Tameza, su origen se basa en la representación realizada por los eruditos Octavio
Bellmunt y Fermín Canella para su obra Asturias.
Se puede observar que la primera parte del
escudo hace referencia a su pasado eclesiástico, haber pertenecido a la Mitra
ovetense, mientras que la segunda se relaciona con un suceso del concejo, real
o legendario, pero en todo caso hermoso.
A estos efectos, los dos sucesos no tienen
la misma importancia, a mi parecer. Lo primero les ha ocurrido a muchos
municipios asturianos, lo segundo es particular e identificativo de este
concejo.
Por ese motivo, primaría lo significativo,
dejando solo el segundo cuartel y añadiendo la Cruz de los Ángeles, por su
pasado eclesiástico vinculado a Oviedo. Se podría dejar la corona real abierta,
mucho más asturiana que la cerrada, por su pasado vinculado a la corona y su
origen.
De sinople, dos toros embistiéndose,
de oro el diestro y de plata el siniestro, surmontados por la Cruz de los Ángeles engalanada
con piedras preciosas.
Quizás sea el momento de aclarar distintos términos en referencia al
vocabulario utilizado para designar la posición de una figura respecto a otra:
·
Sostenida es cuando una pieza o figura
lleva otra debajo unida a ella.
· Sosteniendo es lo contrario, cuando una
pieza lleva otra carga por encima unida a ella.
·
Surmontada o superada es la figura que
tiene otra por encima, pero sin tocarse.
· Sumada o cimado es la pieza o figura que en
su parte superior tiene otra figura unida a ella.
El cuadrilongo de punta redondeada, que se
utiliza en todos los territorios de la Península Ibérica, es decir, España y
Portugal, y en algunos países europeos de influencia española, tiene unas proporciones
fijas de 5 partes de ancho por 6 de alto, y se consigue por la unión de un rectángulo
de 5 de ancho por 3,5 de alto, y un semicírculo inferior, con un radio de 2,5.
Hay que tener en cuenta que estos números no son medidas, son proporciones.
El modelo tipo francés, consta de un rectángulo
de 5 de ancho por 6 de alto, al que se le redondea las esquinas inferiores con
un radio de 0,5 y se le añade una punta por la unión de dos cuartos de círculo,
con el mismo radio de 0,5.
Alguien
me había pedido que explique algunos conceptos heráldicos, con el fin de que
algunas personas, que no están habituadas con estos términos, no se pierdan.
Empecemos
por identificar las diferentes partes del escudo:
Las
particiones son las divisiones que se hacen de un escudo mediante líneas y
esmaltes. Hago una muestra de algunas de ellas, junto con una numeración que
indica el orden de blasonamiento de las mismas. En algunos casos, este orden
puede diferir de unos autores a otros, y no descarto algún error mío.
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